jueves, 13 de noviembre de 2008

He stole all hearts away...


Chris Martin, vocalista de Coldplay, dijo alguna vez que la razón por la que le gustaba tanto la música era por que le hacia sentir cosas que la gente no podría entender. Sin duda, por muy decaídos o felices que estemos, la música toca una fibra en nosotros que nada más puede alcanzar. Hay ciertas canciones que simplemente llegan en un momento especial, y es sólo cuando escuchamos sus primeros acordes que podemos olvidarnos de todo, el mundo puede estar cayéndose pero simplemente no nos importa. Sólo queremos dejarnos envolver por la música. Desde hace unos días, mi canción elegida es "First of the gang to die" de Morrissey. Sé que no tiene nada que ver con mi vida en este momento, pero cada vez que la oigo me siento liberado, emocionado. De repente todo está en orden. Algo que ni yo puedo entender.



No hay comentarios: